Antes de empezar a hablar de esta maravillosa raza, hay que resaltar que la principal característica del coton en lo referente a su aspecto es su manto ALGODONOSO, BLANCO Y LARGO, y su mayor virtud es su encantador carácter. Este gran desconocido resulta ser una mascota para compañía perfecta.

La historia de esta raza es exótica, como la isla de la que es originario, Madagascar. El nombre de la raza deriva de la palabra francesa "coton" que significa algodón, y del puerto Tuléar de Madagascar.  Tuléar fue un puerto popular de barcos mercantiles que navegaban el Océano Indico y se cree que alrededor de los siglos XV-XVI, los mercaderes europeos introdujeron a Madagascar varios perros de compañía. Según la leyenda, debido a naufragios de algunos de estos navíos, algunos de estos aventureros junto con sus perros lograron nadar hasta la orilla de la Isla de Reunión, de donde surgió el Coton de Reunión, este perro está extinguido actualmente, pero sus descendientes en Madagascar fueron desarrollados a través de un programa de reproducción. Estos perros pioneros, se mezclaron con los perros del lugar, y de tal unión nació una nueva raza, la cual se distinguió por el pelo de textura algodonosa del que procede su nombre.

Esto produjo al conocido actualmente como Coton de Tuléar por la ciudad de Tuléar en Madagascar. El pequeño Coton se dio a conocer como el perro de la realeza porque era el favorito de la nobleza francesa que habitaba en las islas durante la época colonial. Es probable que la raza haya evolucionado por cruces entre Bichón y otras razas.
Se presume que por su belleza y su personalidad afectiva, estos perros fueron ofrecidos al Rey y a los nobles. En el siglo XVII, el Coton de Tulear fue adoptado por la monarquía tribal "Merina", y se prohibió su pertenencia a personas que no formaran parte de la realeza y de la aristocracia. Así se le le dió el título de "El Perro Real de Madagascar." Antes del siglo XX era una ofensa que un plebeyo tuviera en propiedad uno de estos perros, y actualmente sólo el estrato más alto de la sociedad de Madagascar es lo bastante afortunado como para tener un coton.
El Coton de Tulear fue reconocido bajo el standard nº 283, en el grupo noveno, Perros de compañía, puesto que su función es deleitar a su dueño. Actualmente es una raza rara y escasa, pero debido a su creciente popularidad está extendida en todos los países a nivel mundial, con reputados criadores.

CARÁCTER DEL COTON DE TULEAR

SALUD DEL COTON DE TULEAR

Pese a su delicado aspecto, aparente fragilidad y su reducido tamaño, este perro originario de la isla de Madagascar, goza de una salud de hierro y de una gran longevidad ( pueden llegar a vivir de 15 a 18 años en buenas condiciones ) y muestra una robustez asombrosa, con una fortaleza increíble, sólo hay que considerar las inhóspitas condiciones donde vivieron en las selvas de Madagascar, donde las madres cotonas se enfrentaban a los cocodrilos para poder robarles sus huevos y ofrecérselos a su cachorros, como alimento. Sin duda, un acto valiente y noble, como la misma raza.

No es una raza propensa a tener enfermedades. Nosotros prestamos especial interés en revisar periódicamente sus oídos ( al tener orejas caídas propias de la raza, su ventilación no es grande ). Nuestros habaneros están testados por un veterinario oficial de ojos, rótulas, corazón y testículos ( en caso de los machos ).

La sociabilización del cachorro es una labor muy importante, es aquí donde el criador realiza su tarea más bonita y donde demuestra su profesionalidad, que se verá compensada con unos cachorros adorables, equilibrados, felices, juguetones, sanos y bellos.

Para un ejemplar de exposición los cuidados necesarios para lucir su majestuosa melena son un poco más constantes, acostumbrando al cachorro desde una tierna edad a las sesiones de peluquería con palabras amables, como si peinarle fuera una caricia más, debiendo cepillar con delicadeza con una cierta rutina, bien con un peine de mantequilla o un peine de púas metálicas. El coton de tulear no necesita ni empaquetado ni aceitado de pelo, como otras razas, y en exposiciones caninas no lleva moños u otros lazos en el pelo de la cabeza, ya que es considerado que su aspecto debe ser natural, casi rústico, sólo permitiendo el corte de las zonas higiénicas, tales como almohadillas plantares, etc.

Para un ejemplar de compañía podemos optar por un cepillado 2-3 veces por semana, o bien por la realización de un corte de cachorro, para los que no quieran tener a su ejemplar con pelo largo, el aspecto será más juvenil, divertido y más cómodo para nosotros.
No mudan pelo y son perros hipoalergénicos.
Su manto es suave, denso, blanco, largo y de textura algodonada.